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IGLESIA DE SAN JUAN

LaIglesia de San Nicolás, antigua iglesia de San Juan, fue construída entre finales del siglo XII y comienzos del siglo XIII, por lo que pertenece al románico tardío.

Levantada por la Orden de San Juan de Jerusalén, esta iglesia-fortaleza tenía bajo su control el puente que atravesaba el Miño y el cuidado del hospital de peregrinos, de ahí su aspecto de fortificación.

San Nicolás perteneció, primero, a la Orden de Santiago; después, a la Orden de San Juan de Jerusalén, más tarde de Malta. Fue reedificada piedra a piedra en su lugar actual cuando el embalse de Belesar inundó los dos barrios que formaban el antiguo Portomarín ( San Nicolás y San Pedro).
San Juan de Portomarín es uno de los edificios románicos más impactantes, no sólo de la provincia de Lugo, sino de toda Galicia. Destaca el gran rosetón, con un diseño geométrico.

Esta iglesia-castillo tiene planta de nave única. El ábside consta de un tramo recto cubierto por bóveda de cañón y otro semicircular con bóveda de horno. Cuenta con tres magníficas portadas esculturadas, decoradas con una fuerte impregnación del simbolismo románico. La principal, evoca la visión apocalíptica plasmada en el Pórtico de la Gloria; en el tímpano, encontramos un Pantocrátor y las arquivoltas adornadas con los 24 ancianos del Apocalipsis dispuestos en forma radial, hecho que hace vincular esta puerta a la escuela del Maestro Mateo. En la puerta Norte figura una Anunciación, enmarcada por arquivoltas decoradas con motivos geométricos. La puerta Sur muestra en el tímpano figuras de santos, motivos vegetales, animales y figuras humanas. En la fachada posterior aparece un pequeño rosetón y, debajo, un ábside en el que se abren tres celosías, enmarcadas por columnas góticas y arcos de medio punto, decorados con motivos geométricos.

En el interior de la iglesia, la decoración es más sobria, aunque conserva restos de pinturas góticas, un baldaquino del siglo XVI y una magnífica escultura de Cristo Crucificado, del siglo XIV y realizada en madera policromada.La iglesia aglutinaba la función religiosa y castrense, de ahí su voluminosidad.

El 3 de junio de 1931 fue declarada Monumento Histórico - Artístico.
 
IGLESIA DE SAN PEDRO

La Iglesia de San Pedro data del siglo X, aunque consagrada en el 1182 por el Obispo de Lugo Rodrigo II, según la inscripción que figura en la portada del templo.

Iglesia de origen románico, declarada Monumento Histórico Artístico, fue trasladada piedra a piedra desde el antiguo Portomarín cuando las aguas del embalse de Belesar inundaron la villa.

Construída en sillería de granito, conserva del estilo románico su portada , formada por arcos de medio punto con arquivoltas cubiertas de motivos geométricos. El tímpano, sostenido por batientes con forma de cabeza de toro, se ornamenta con dos semicírculos estrellados.
En el interior contiene un sepulcro de piedra del Marqués de Bóveda, y destaca la hermosura del retablo del siglo XVI.
 
ESCALINATA Y CAPILLA DE LAS NIEVES        
  

La escalinata de Portomarín se encuentra frente al puente.Hecha en granito, conduce a la capilla de la Virgen de las Nieves.
La capilla está situada en un arco del antiguo puente medieval, en el casco urbano de la villa, en el lugar que antaño había ocupado el hospital de la Orden de San Juan, conocido como Domus Dei.

Se trata de una sencilla construcción hecha en mampostería, con nave única y espadaña en la fachada. 
 
PUENTE DEL MIÑO

La construcción más antigua data del siglo II y se hizo por la necesidad de paso para cruzar el Miño. Entorno a ella fue naciendo poco a poco un poblado.
La Ruta de Santiago fue dirigida a este puente porque era la única manera de cruzar el río sin utilizar balsas o barcas. Con la creación del embalse de Belesar se construyó un nuevo puente.
 
CASTRO DE CASTROMAIOR: El Castro del Camino de Santiago

El Castro de Castromaior es uno de los yacimientos arqueológicos de la Edad de Hierro más relevantes del Noroeste de la Península Ibérica, como demostraron los resultados de las últimas intervenciones desarrolladas en él.

El buen estado de conservación del mismo permite realizar un examen de los modelos constructivos castreños, debido, sobre todo, a la inactividad agropecuaria, que mantuvo sellados los últimos niveles de ocupación y posterior destrucción.
 Su situación, a escasos metros del Camino de Santiago, ofrece óptimas condiciones para el desarrollo de un programa de intervención que pretende convertir este bien patrimonial en un recurso cultural y turístico de primer orden, teniendo como base la investigación arqueológica.

El Camino Francés se articula en varias etapas determinadas por las jornadas de los caminantes, siendo Portomarín – Palas de Rei una de las mejor definidas. El Castro de Castromaior está situado sobre una elevación que domina parte de esa etapa. La visita al yacimiento arqueológico no supone ningún rodeo ni desvío del peregrino en su camino, puesto que el trazado original pasa por uno de los fosos norte del complejo defensivo del poblado castreño. La posibilidad de la visita al castro durante el recorrido del Camino hace que este conjunto arqueológico adquiera una dimensión más allá de un simple punto de parada en el peregrinar hacia Santiago.

Castromaior es un recurso patrimonial de primer orden que, sin duda, nos amplía y aproxima al conocimiento de nuestro pasado, punto de referencia de los caminantes en su viaje, de marcado carácter histórico y cultural, además de religioso y espiritual.